Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, lunes, 16 de octubre de 2023.
Intercambio de Experiencias Internacional en Bolivia destacó la importancia de la Agricultura Sostenible y la Diversidad Cultural de los pueblos de la región andina.
Durante cinco días de discusiones y aprendizaje en la ciudad de Santa Cruz, se realizó el evento internacional denominado “Intercambio de Experiencias “Intercambio de experiencias entre Organizaciones de Productoras y Productores Agrícolas y Forestales (OPAF), Pueblos Indígenas, Originarios, Afrodescendientes y Comunidades locales, en el marco del Decenio de la Agricultura Familiar” el mismo que concluyó el día de hoy lunes 16 conmemorando el Día Mundial de la Alimentación. Líderes de organizaciones de Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú se reunieron para debatir y compartir conocimientos sobre la contribución de los bosques y el conocimiento ancestral al establecimiento de una alimentación saludable y sistemas agroalimentarios sostenibles.
Este evento se llevó a cabo en el marco del «Decenio de la Agricultura Familiar», una iniciativa global destinada a resaltar la importancia de la agricultura a pequeña escala y la agricultura familiar en la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible. Organizado por el Mecanismo Forest Farm Facility (FFF) de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) junto con la AOPEB (Asamblea de Organizaciones de Productoras y Productores Ecológicos de Bolivia), el evento ha brindado una plataforma única para el intercambio de experiencias y la promoción de la diversidad cultural en la producción de alimentos. Los representantes de los cuatro países de forma unánime han coincidido en la creación de una Red de facilitación, colaboración e incidencia entre las organizaciones de productores agrícolas y forestales de Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú.
La agenda congregó al menos unas 80 personas, 11 experiencias de cuatro países, Boris Fernández, Coordinador Nacional del FFF, comentó que el evento mostró el experiencias en el diseño de políticas públicas, otro eje importante fue las experiencias que mostraron cómo los sistemas agroalimentarios se desarrollan de forma integral y sostenible, un tercer componente son las experiencias por ejemplo de asaí, copaibo, cacao y miel son transformados y se les genera un valor agregado, finalmente el componente de mercados que abordó no solo experiencias que de alguna manera incentivan toda la cadena, sino que el propio evento permitió generar una rueda de negocios que generó 80 citas realizadas y 220 mil dólares en intenciones de negocios.
Las jornadas estuvieron nutridas de espacios de intercambios de información y conocimiento, destacando las experiencias demostrativas de asaí (Porvenir, Santa Cruz), miel de Asociación de Apicultores del Departamento de Santa Cruz (ADAPICRUZ) y el manejo de copaibo en Rio Blanco, se realizó una feria de productos del bosque y agricultura donde se integraron productos como el ají chuquisaqueño, el haba altoandina, productos de palma real, cacao, asaí, artesanías del Ecuador y Colombia. Se tuvo una noche cultural y la rueda de negocios, así como visitas a la empresa de alimentos liofilizados Natur.
Luis Miguel Aparicio, Gerente del FFF, expresó su alegría por la diversidad de sabores presentes en los productos de numerosos agricultores provenientes de entornos boscosos. Aparicio señaló que estos agricultores enfrentan retos comunes a causa de las cambiantes condiciones del cambio climático. Además, manifestó el firme interés del FFF en expandir su alcance y aumentar el impacto de su labor en la región amazónica y Centroamérica. Aseguró que los diálogos como los sostenidos en este evento tienen el potencial de influir en la formulación de políticas, la asignación de recursos fiscales y la implementación de medidas destinadas a mejorar la calidad de vida de los agricultores más desfavorecidos.
Por su parte, Adriana Yepez, FAO Colombia, subrayó que las principales conclusiones del encuentro fueron: la importancia de reconocer el papel vital desempeñado por las comunidades locales en la conservación y uso sostenible de los bosques. Destacó la necesidad de promover la colaboración intergeneracional y de género para garantizar la continuidad de esta labor y resaltó el potencial de estas comunidades para emprender negocios rentables, enfatizando la importancia de un mayor apoyo financiero y técnico. Asimismo, hizo hincapié en el reto de preservar y revitalizar el conocimiento ancestral que sustenta la producción de estas comunidades. Este enfoque integral refleja la visión de la FAO en su compromiso por un futuro sostenible en armonía con nuestros recursos naturales.
Melquiades Véliz, en su calidad de representante de la AOPEB, resaltó el valioso aprendizaje que todos los productores han adquirido durante estos cinco días, abarcando todos los aspectos de la cadena de producción y temas de mercado. Destacó que estos temas son de conversación cotidiana en las comunidades, y ahora es el momento de llevar estas conversaciones a una red más amplia, con el objetivo de un crecimiento colectivo como productores.
Luis Carlos Montaño, representante de los pueblos afrocolombianos del Pacífico Colombia, manifestó que el escenario fue perfecto para compartir el conocimiento, muchas iniciativas locales han tenido la oportunidad de aprender de iniciativas de productores locales, esperamos que el siguiente evento muchos lleguemos con más certificaciones y podamos generar más acuerdos comerciales.
Natalia Tanguila, Vice prefecta del Gobierno Autónomo de la provincia de Napo en Ecuador, enfatizó la importancia de brindar un sólido respaldo y una mayor coordinación entre las organizaciones participantes. Asimismo, resaltó que la creación de esta red de colaboración representa un paso fundamental hacia una labor conjunta que seguramente contribuirá al seguimiento de los temas tratados y a la mejora de los productos para futuros encuentros. Tanguila manifestó el deseo de avanzar en la comercialización de productos, pero con un enfoque especial en la protección de sus territorios, que se ven amenazados por la minería y la explotación petrolera.
Este evento internacional ha sido un auténtico éxito, promoviendo la colaboración entre comunidades y organizaciones de todo el mundo en beneficio de la agricultura familiar, la conservación de bosques y la promoción de la alimentación saludable. Las lecciones aprendidas y las conexiones establecidas aquí sentarán las bases para futuros proyectos que contribuirán al bienestar de comunidades locales y a la preservación de nuestros valiosos recursos naturales.
