Algunos humedales del sector están siendo desecados por gente inescrupulosa a fin de extraer turba, asimismo existen restos de trabajos de minería y desechos que más tarde escurren a las lagunas.
Elaborado con información de Natalio Flores y Santos Mamani, director y guardaparque del PN ANMI Cotapata
Redacción y fotos: Vladimir Ledezma Maldonado
La Paz, julio de 2023 (ANA).- El campamento La Cumbre del parque nacional y Área Natural de Manejo Integrado Cotapata (PN ANMI-Cotapata), se encuentra a 4470 metros de altura, forma parte del Corredor de conservación Madidi-Pilón Lajas-Cotapata (CMPLC), pese a que desde allí se provee agua dulce para la ciudad de La Paz, carece de energía eléctrica y los guardaparques casi no tienen insumos, estando el lugar muy desatendido por las autoridades tanto nacionales como municipales.
Allí se encuentran las represas Estrellani y más arriba Sorojahuira que alimentan a la represa de Incachaca de donde se distribuye el líquido potable a la sede de gobierno, existiendo todavía más arriba, por el sector cercano al comienzo del camino precolombino El Choro, otras dos lagunas naturales: Zunturuni y Huancuni, con las cuales se logró paliar la sequía del año 2016, en la ciudad de La Paz.
Derretimiento de glaciares
Igualmente, en una visita conjunta con el guardaparque Santos Mamani, se pudo evidenciar que los glaciares del área están en pleno proceso de derretimiento a causa del cambio climático provocado por las actividades humanas, pero gracias a la reciente nevada en el área, la situación de falta de agua ha disminuido notablemente.
“Esta es la represa Estrellani y Sorajahuira que alimenta a la represa de Incachaca, de ahí es distribuida el agua potable para la ciudad de La Paz, tanto para la zona sur como para el noroeste. Hay dos lagunas naturales: Zunturuni y Huancuni; en la sequía del 2016 se ha acudido a ambas lagunas y así, se pudo abastecer. Ahora, gracias a Dios, por lo menos ha caído la nevada y eso también algo va paliar, porque los glaciares de este sector están derritiéndose”.
Es necesario tener presente que gracias a las nevadas y precipitaciones pluviales, los glaciares, represas y lagunas naturales pueden realimentarse del líquido que suministran, en cuanto a que las nubes cargadas de humedad provienen de la evotranspiración de los bosques yungueños y de la amazonía.
“…las nubes que son provenientes de la amazonía, de los bosques yungueños, es lo que carga el hídrico y por eso aquí en la Cumbre hay las lluvias, granizo o nevada, el choque de lo que es el vapor caliente y el frío”, enfatizó Santos Mamani.
Desecación de humedales y restos de trabajos mineros
También fue posible advertir la paulatina e intencionada desecación de algunos humedales del área, ello provocado por personas desconsideradas que se dedican a extraer turba para comerciar con ella.
Pero, para sacar la turba, desecan los humedales previamente, inclusive quemando la vegetación y consecuentemente afectando a la fauna de esos sitios de altura, “ese es uno de los riesgos, que no están cuidando los bofedales, las nacientes de agua dulce y esa es la mala conciencia de los causantes”.
Inclusive se evidenció restos de excavaciones mineras en el lugar. Cuando se efectuaron los trabajos respectivos y constatando que no contaban con ninguna autorización, estos no fueron permitidos por los guadaparques, pues se estaba empleando agua dulce para procesar minerales.
De igual manera se observó la existencia de visitantes que dejan tirados restos de comida en el sector, como bolsas plásticas y botellas de vidrio que contenían cerveza, entre otros; estos restos, más tarde, y con los rayos ultravioleta, escurren hasta las lagunas de agua dulce.
Campamento la Cumbre carece de energía eléctrica
Aproximadamente a treinta kilómetros del kilómetro cero, el campamento La Cumbre del PN-ANMI Cotapata carece de suministro de energía eléctrica y la que se provee mediante paneles de energía solar, es insuficiente para abastecer necesidades básicas de los guardaparques (3) que cuidan el lugar, pues en las noches la temperatura desciende hasta los ocho grados bajo cero, por lo que requieren calefacción y contar con duchas de agua caliente.
“No tenemos energía eléctrica, es solamente a panel solar y pese a que está a medio kilómetro y la energía llega a la antena de TIGO, y no tenemos esa autorización. Lindo sería que la empresa Tigo nos dé una autorización para poder extender de ahí la energía al campamento de La Cumbre. Así tener una calefacción al interior y tener ya una cosa adecuada, una ducha, etc. pero al momento no tenemos eso”, lamentó el guardaparque Mamani.
Inclusive la situación anterior era más precaria, en cuanto a que los techos del campamento eran de teja y escurría el agua de la lluvia hacia el interior, por lo que para dormir los guardaparques debían cubrir con nylon las goteras. Ya en el año 2013 se cambió los techos a otros de calamina por los que ya no filtra el líquido.
Sin embargo, a poca distancia del campamento, están instaladas antenas de una empresa de comunicaciones, desde donde, según sugieren los guardaparques, podría serles bajada energía eléctrica, previo convenio con los responsables.
Este reportaje fue realizado en el marco del proyecto “Fortalecimiento de las capacidades de comunicadores y periodistas para la conservación de la biodiversidad del Corredor Madidi-Pilón Lajas-Cotapata (MPLC)” implementado por la Asociación Boliviana Pro Defensa de la Naturaleza (Prodena), con el apoyo financiero del Fondo de Alianzas para los Ecosistemas Críticos (CEPF) a través de Conservación Amazónica –ACEAAA en Bolivia