Norte Potosí, un área con altos índices de pobreza y fuertes impactos por el cambio climático, pero con una riqueza cultural y natural única que trabajando con el turismo sostenible, es una fuente de desarrollo económico y social para el municipio de Torotoro.
Colaboración de Daniela Claros
Torotoro, mayo de 2022.- Desde hace más de diez años, el municipio de Torotoro ha apostado por el turismo inclusivo y sostenible que tiene un sello de calidad y calidez, como una estrategia para la adaptación al cambio climático fortaleciendo así su resiliencia integral. Este sistema de vida ofrece un turismo vivencial, aprovechando el patrimonio natural del parque Nacional Torotoro y la cultura local; con su música, tradiciones y patrimonio alimentario.
De esta manera se ofrece una experiencia única a los visitantes nacionales y extranjeros, mediante el turismo biocultural, un concepto que concibe al visitante como parte de la familia en las comunidades. (La región).
Esta forma de hacer turismo se ha consolidado como un importante motor de la economía, generadora de empleo y bienestar para los pobladores del municipio que cuenta con el apoyo del gobierno local, el servicio Nacional de Áreas Protegidas (SERNAP) y de distintas organizaciones locales involucradas. Sin embargo, esta actividad no ha sido ajena a los efectos de la pandemia por COVID-19 y hoy se encuentra en pleno proceso de reactivación.
La cooperación Suiza, a través del proyecto Biocultura y Cambio Climático, un esfuerzo conjunto entre el gobierno boliviano y la Cooperación Suiza para contribuir a la superación de la pobreza y al “Vivir Bien” de comunidades campesinas-indígenas en áreas de pobreza extrema, pero de alta riqueza en términos de biodiversidad y cultura de la zona andina de Bolivia (Proyecto Biocultura y CC. Cooperación Suiza en Bolivia), ha apoyado el desarrollo de esta innovación en el turismo, como una alternativa para el desarrollo integral y la adaptación al cambio climático a través de la generación de capacidades locales para que los actores regionales se empoderen y planifiquen su propio desarrollo.
Este destino turístico, Torotoro, está posicionado a nivel nacional e internacional y genera beneficio económico para más de 400 familias de ocho comunidades locales. Entre los avances que se han logrado en este tiempo figura la consolidación de los emprendimientos comunitarios de las cabañas Umajalanta y Pascana “El Vergel”.
De esa manera se ha logrado facilitar los procesos para que las comunidades estén en posición de recibir y atender a los visitantes, siendo partícipes de una experiencia diferente a la del turismo convencional. De igual forma, se ha contribuido al desarrollo de instrumentos de planificación como el plan de Desarrollo Turístico del Municipio y el reglamento de Operaciones Turísticas del parque Nacional Toro Toro.
Pese a los efectos de la pandemia, actualmente esta área protegida se encuentra en un proceso para reactivar la llegada de visitantes y generar nuevamente un proceso de desarrollo sostenible, con el turismo biocultural que dinamiza procesos e involucra a diversos sectores como el transporte, los servicios de hospedaje, servicios gastronómicos y otros. El gobierno local junto a los distintos actores ha gestionado certificaciones internacionales como “Destino Sostenible” y “Destino Bioseguro”.
Las experiencias desarrolladas en este territorio están siendo visitadas por Edita Vokral la embajadora suiza en Bolivia,, Ueli Mauderli, jefe de la Cooperación Suiza en Bolivia, además de Thais Vargas, de la agencia Francesa de Desarrollo, con miras a conocer de primera voz con los actores locales la experiencia que ha permitido posicionar el turismo biocultural consciente (que busca enaltecer el patrimonio biológico y cultural con viajeros de manera responsable), como una herramienta para potenciar el desarrollo integral ambiental, cultural, social y económico; una alternativa de diversificación encarada como estrategia de adaptación a los efectos del cambio climático.
“Hemos visto experiencias muy interesantes y podido apreciar las bellezas naturales de este territorio tan rico y diverso. Cuando empezamos con el proyecto de Biocultura, el año 2009, lo hicimos como una apuesta al desarrollo desde las mismas bases de cada logar, para que sean los mismos pobladores y pobladoras quienes desarrollen y se beneficien de los esfuerzos para desarrollar la región. Ahora podemos observar que hemos logrado un turismo de base comunitaria de alta calidad y, principalmente, con un enfoque de sostenibilidad”, señaló al respecto de esta visita la embajadora Vokral.
La cooperación para el Desarrollo de la Embajada de Suiza en Bolivia, mediante el proyecto Biocultura y Cambio Climático, ejecutado por la asociación Boliviana para el Desarrollo Rural – Pro-Rural conla concurrencia de sus socios estratégicos MIGA (Movimiento de Integración Gastronómico Boliviano) y PROSUCO (Promoción de la Sustentabilidad y Conocimientos Compartidos), en estrecha coordinación con la autoridad Plurinacional de la Madre Tierra (APMT), ha apoyado el proceso de construcción del turismo con identidad, el fortalecimiento de capacidades de los actores locales y del gobierno municipal cuyo resultado ha sido una mejora en la calidad de servicios.
Por lo anterior, este territorio se constituye en un laboratorio biocultural de aprendizaje que permite compartir las experiencias de desarrollo basadas en el turismo, para que estas puedan ser replicadas por otros municipios con características similares, pero con sus propias particularidades.
Desde los actores
“El turismo de Torotoro es comunitario, incluimos a todas las comunidades, beneficiando a todos, para salir de la pobreza, estamos en una de las regiones más pobres de Bolivia, pero nuestro municipio sobresale por su turismo, para que vean que otras regiones también pueden mejorar no necesariamente con minería o destruyendo a la Madre Tierra”, Elías Choquecheca, presidente de la Asociación de Guías AGET-MUTT.
“Hemos armado un plan de reactivación post pandemia, con diferentes acciones como un agresivo plan de marketing digital, un work shop (taller de trabajo para capacitaci) con operadores turísticos, el tambo Simposio (evento organizado por MIGA, el lanzamiento como destino turístico sostenible y bioseguro, es uno de los pocos destinos turísticos donde por lo menos hemos llegado a la mitad del flujo turístico que generábamos antes de la pandemia”, Xavier Camacho, responsable Turismo Municipio de Torotoro.
“Esta pandemia nos ha perjudicado, nosotras como mujeres queremos salir adelante, a veces como madres no tenemos dinero, traemos nuestro tejido a la asociación, eso se vende y ya tenemos algo para nuestros hijos.” Fidelia Quecaña, tejedora asociación Rosa T’ika.