Existen varios abogados probos y especializados en la temática medioambiental que deberían ser considerados para integrar ese tribunal que hasta hoy no cumplió sus funciones.
La Paz, marzo de 2023 (ANA).- Activistas ambientales que realizan una campaña orientada a la recolección de firmas destinadas a un referéndum para la elección de magistrados de manera directa por parte de la ciudadanía y no así por parte de los asambleístas de la Asamblea Legislativa Plurinacional (APL), hicieron hincapié en que el tribunal Agroambiental defienda los derechos de la naturaleza, de la Madre Tierra, de la biodiversidad.
Veintiséis magistrados conforman las cuatro instancias que constituyen el órgano judicial: Tribunal Constitucional (9), Tribunal Supremo de Justicia (9), Consejo de la Judicatura (3) y Tribunal Agroambiental (5), los cuales no pueden ser reelectos y su mandato fenece en el mes de octubre de este 2023. De las cuatro instancias cuyos nuevos magistrados serán electos ese mes, los de las dos primeras serán votados a nivel nacional y los de las dos últimas, a nivel departamental.
“Entonces este octubre vamos a elegir a veintiséis de esos magistrados; los del tribunal Agroambiental y los del consejo de la Judicatura se eligen en circunscripción nacional, es decir que toda Bolivia va votar por esos magistrados, y de los otros dos órganos se eligen en circunscripción departamental, es decir por La Paz vamos a elegir a nuestros representantes al tribunal Plurinacional Constitucional o al tribunal Supremo de Justicia, uno nos va tocar…”, ilustró el escritor e investigador Manuel Morales Álvarez.
Tribunal Agroambiental no elaboró código procesal
Según nuestros informantes, una de las principales falencias del actual tribunal Agroambiental -el más reciente fue electo en 2017-, es que no elaboró un código procesal medioambiental, lo que provocó y provoca que las causas que ventila dicho tribunal, hayan dejado de abarcar temas considerados sustanciales como la defensa de los derechos de la naturaleza amparados tanto por la Constitución Política del Estado como por otras leyes, fomentando así los crímenes contra los ecosistemas.
En consecuencia la ausencia del código procesal agroambiental ha permitido que el tribunal Agroambiental sólo contemple causas relacionadas a litigios de la propiedad agraria, dotación de tuberías por los municipios u otros semejantes.
“Se ha podido evidenciar que no han hecho nada más que trabajar la parte de la tierra: límites, propiedad de la tierra…como tribunal agrario, pero ni una sola vez el tribunal ha hecho una defensa de todos los componentes de la Madre Tierra: contaminación, transgénicos, está prohibido por una ley; nunca se han puesto las pilas para eso”, observó Rita Saavedra, activista medioambiental, dirigente vecinal y representante del colectivo “Bolivia libre de transgénicos”.
Inclusive algunos activistas revelaron que la justicia ordinaria estaría procediendo a invadir competencias exclusivas del tribunal Agroambiental como impartir justicia en los aspectos forestales, de cultivos ecológicos, de aguas y biodiversidad. Ello porque muchos litigantes, por más que su caso esté directamente relacionado con la temática agroambiental, prefieren acudir a un juez ordinario que a uno agroambiental al ni siquiera conocer donde se encuentran dichos tribunales especializados.
Juristas especializados en temática medioambiental
De la misma manera los ambientalistas consultados se refirieron a la existencia de recursos humanos en el país dentro del campo de la jurisprudencia medioambiental, pues inclusive existen especialidades al respecto contempladas en la profesión de la abogacía, tanto a nivel de pregrado como de posgrado.
Sin embargo, al no brindar oportunidades a esos especialistas para desempeñarse en instancias como el tribunal Agroambiental, inclusive en condición de suplentes de los jueces titulares, estaría ocupando esos espacios personal que favorece las causas de quienes depredan la naturaleza con los consecuentes daños en contra del medioambiente.
“En este momento hay varios abogados ambientales, hay una especialidad. Por ejemplo en una de las organizaciones que agrupa colectivos medioambientales, tenemos un colectivo de abogados ambientalistas y agraristas que nos están dando la mano en esta lucha por el medioambiente. ¿Entonces por qué no podemos elegir a una de esos, esas profesionales que sabemos que se meten al lodo con nosotros contra las injusticias ambientales?, reflexionó la representante de “Bolivia libre de transgénicos”.
Concluyó proponiendo un diálogo con el tribunal Agroambiental a objeto de que se incrementen las sanciones contra quienes deforestan; contra quienes contaminan los manantiales, ríos, riachuelos, lagos, humedales y lagunas; contra quienes cazan y trafican con animales silvestres; contra los mineros que extraen oro a costa de la depredación de la amazonía y los valles yungueños, en síntesis, contra todos aquellos que dañan a la Madre Tierra y a sus criaturas que no se han divorciado de ella. (VLM)